Dolor testicular agudo en niños ¿Qué deben hacer los padres?

La primera causa de dolor testicular agudo es la torsión de una estructura del testículo llamada Apéndice testicular, el cual es un remanente de tejido, que causa mucho dolor, lo bueno es que este tipo de padecimiento puede manejarse con medicamentos para controlar el dolor y la inflamación, y solo en caso de que el dolor no ceda, podría requerir de cirugía para extraer esa porción del testículo que causa dolor.

La segunda causa de inflamación y dolor testicular en el paciente preadolescente es la Orquiepididimitis, la cual es una infección del cuerpo del testículo y del epidídimo, que son las regiones donde se encuentran almacenados los espermatozoides. Esta infección puede originarse por el paso de bacterias, como la llamada E. coli, a través del conducto llamado deferente, el cual conecta la uretra con el testículo. El tratamiento para esta entidad consiste en antibiótico y antiinflamatorio por vía oral, logrando una respuesta, usualmente, en poco tiempo. Es importante realizar el seguimiento por que se puede relacionar a aparición de quistes de epidídimo o de hidrocele. ¿Quieres saber un poco más sobre Hidrocele? haz clic aquí.

La tercera causa de dolor testicular en los niños preadolescentes es la Torsión Testicular, pero esta entidad, es la que en verdad pone en riesgo al testículo, y también es importante el tiempo en el cual se atiende, ya que de forma general, el tratamiento requiere de cirugía en las primeras 6 horas a partir de iniciado el cuadro. Por esta razón, lo que debes hacer si tu hijo presenta dolor agudo del testículo es:

1. Llamar al servicio de urgencias para poder realizar una consulta con el urólogo pediatra o cirujano pediatra y descartar por completo la necesidad de cirugía.
2. Acudir al servicio de urgencias, donde dependiendo de la exploración, se podrá requerir de un estudio llamado Ultrasonido testicular con Doppler, el cual sirve para evaluar la irrigación de sangre al testículo.
3. Seguir las instrucciones de antibióticos y antiinflamatorios indicadas por el médico.
4. Prestar atención a los datos de alarma como aumento de la consistencia del testículo (se siente como «piedra»), localización anormal del testículo con dolor (se encuentra muy arriba en la ingle o entrada del escroto) y aparición de vómitos y/o fiebre.